domingo, 7 de agosto de 2016

Mejor solo...

A ver, no es un mito y alguien te lo tiene que decir claro algún dia:

No vas a poder pasarte el resto de tu vida jugando con tus amigos al Imperial Assault por mucho que te parezca el mejor plan para tus próximos veinte años.

No todo van a ser fines de semana llenos de rol, tiradas de dados, tokens, piezas arriba, cartas abajo... eso también se acaba.

lo se.. lo se.. déjame que te explique



Afino un poco más para explicar mejor que quiero decir: Lo que se acaban no son los juegos, éstos seguiran creciendo, mejorando, apareciendo sistemas nuevos, ideas geniales o memorables reediciones. Lo que va a cambiar es tu vida.

Tu tiempo, por millones de motivos que ahora crees que vas a poder combinar, van a consumir tu horario semanal minuto a minuto. Y lo hacen sin que lo notes, como un pequeño virus que te obliga a alejarte del tablero poco a poco. El trabajo, esa chica, aquel chico, el pago del alquiler, la cena en pareja con aquella otra pareja que solo sabe hablar de vinos y pelis de autor, el llanto del bebé, la borrachera del viernes que te anula durante tres días, los exámenes, la tesis,... el mundo es una auténtica baraja de cartas de encuentro que, de repente, se acciona y te plantea un reto tras otro sin dejarte tiempo para nada.
Como vas a pararte a jugar si tienes que controlar Europa!

Y ahí estás, el la lucha diaria por la supervivencia hasta que llega un día que abres aquel armario i ¡oh! ¡sorpresa! ¡Están allí! El Carcassonne, Ticket to Ride Europa, El Ciudadelas, El Catán (el clásico, el de cartas, el de dados, el de dos jugadores, las expansiones, etc....), incluso una versión chunga del Rummikub, un Abalone que le faltan parte de las bolas blancas... y es entonces cuando te das cuenta de que han pasado cinco, siete, ¡diez años! y no has participado ni en una triste partida de tute! y de repente...

¡Que ganas de jugar! ¡Necesitas jugar!

sólo un poquito... un catán rápido...
Giras la cabeza a los lados y rápidamente buscas compañeros para la aventura... a tu pareja no le apetece mucho, tu hija aún no tiene edad suficiente para entender que los dados no se comen, tu mejor amigo vive en Londres, tus otros amigos estan más ocupados comprándose coches y amueblando pisos como para saber donde tienen las fichas del AD&D... La Realidad no sólo te ha arrollado a ti. Lo ves claro: 

ESTÁS SOLO Y NECESITAS JUGAR UNA PARTIDA DE CUALQUIER COSA!

Cada uno lo supera a su manera, oiga!

Esta historia puede parecerse a la tuya, quizá en parte, quizá totalmente, quizá ni por asomo... sea como fuere el problema es que el final de la historia no varía. No tienes los compañeros a mano para jugar, juntar tres personas para abrir un juego se ve una tarea difícil (imagina juntar 5!!!)

Esta es la historia de un servidor, el Jugadista. No me faltan amigos, no me quejo de eso! Lo único que quiero es jugar y, para ser sincero... a mi lo de los videojuegos me vale para un rollo de una noche, pero a mi lo que me va realmente es oír girar los dados, mover fichas, contadores de vida, girar losetas, borrar figuritas del contrincante del tablero... abrir la caja, prepararlo todo, jugar, ganar o perder y volver a meter todo en la caja. Un clásico, vamos!

Todo esto me ha llevado, desde hace unos años a hacer del ONANISMO LÚDICO mi principal actividad jugatoria. Claro que de vez en cuando juego en pareja (o incluso en grupo!) y disfruto de esos momentos como un adolescente desbocado. Pero seamos realista, al final acabas siempre igual, buscándote un rato, un sitio apartado, un poco de calma y... a darle a los dados en soledad.

Este  blog va de eso, de juegos diseñados o adaptados para Onanistas Lúdicos, para aquellos que por el motivo que sea no tienen a mano (!!!) compañeros para matar dragones, construir la Alhambra o desintegrar aliens blaster en mano. Juegos para un solo jugador.

Bienvenidos pues, pasen, vean y jueguen! Pero sobretodo recordad:

Nadie tira los dados mejor que uno mismo...  


No hay comentarios:

Publicar un comentario